jueves, 25 de febrero de 2016

MI “QUIJOTE” (II) (Mª LUZ FERREIRA FERNÁNDEZ)



Continuamos con nuestra recién estrenada sección Mi “Quijote” por cortesía de la siempre entusiasta Mª Luz, de mi partida de noctámbulos clasicistas del Bloque 2. Nos envía su particular y, desde luego, entrañable experiencia con nuestra obra más universal y nos demuestra que los libros, como todo en la vida, tienen su momento oportuno. El del Quijote tardó algo en llegar para Mª Luz pero llegó y, como dice el refrán y seguro que apuntaría el bueno de Sancho Panza, nunca es tarde si la dicha es buena. ¡Gracias, Mª Luz!
                                                          
La primera vez que cayó en mis manos El Quijote no fue buena experiencia. Os explico el porqué.
Era muy cría, unos ocho o nueve años, y tenía una caligrafía muy mala, fatal. Un verano mi padre me compró una libreta y me dijo que por las mañanas debía copiar de un libro una o dos páginas, para que practicara y mejorara mi letra. Me siento el primer día y me planta delante de mí El Quijote. Como comprenderéis, para mí fue un castigo y lo odié. Después de los años, cuando hablé con él, me dijo que su intención era que me aficionara a él y hacerme agradable la escritura. Ya veis que no acertó porque no tenía ni idea de lo que escribía, para mí eran letras, palabras y nada más. Tardé años en volver a él, para leerlo esta vez, y enseguida me olvidé de mi antigua enemistad… Me encantó. Ahora es, quizá, el libro al que más cariño tengo.

viernes, 19 de febrero de 2016

NUEVA SECCIÓN: MI "QUIJOTE" (I)



¡Estudiantes! ¡Profesores! ¡Amigos todos del Feijoo! Inauguramos sección. A estas alturas de la partida sabréis ya casi todos, o quizá no, que andamos de aniversario. Se cumplen este 2016 cuatrocientos años -¡se dice pronto!- de la muerte de nuestro autor más ilustre, Miguel de Cervantes. Y como no queremos que nos pase como al Ministerio de Cultura, al que le han sacado los colores por no organizar actividades bastantes para celebrarlo, nuestra capitana Pilar lleva ya algún tiempo maquinando alguna que otra idea. Algunas pasan por decorar nuestras paredes con motivos de los más quijotescos, otras por una exposición temática y, la que aquí os traemos hoy, por traer a este blog fotos de vuestros Quijotes.
Sabemos que muchos de vosotros tenéis en casa un ejemplar de nuestra novela más universal y nos gustaría que nos mandarais una foto, sola o, si os apetece, acompañada de unas líneas sobre vuestra experiencia con las aventuras del genial hidalgo al que “de tanto leer y el poco dormir, resecósele el cerebro”.


Como el movimiento se demuestra andando, aquí os traigo las mías. Aquí podéis ver mi primer Quijote, que mi padre me regaló cuando tenía unos diez años. Es una versión en cómic con guion de Carlos Soria y magníficas ilustraciones de Chiqui de la Fuente. En sus dos tomos se pueden encontrar los episodios más célebres y, pese a la brevedad, engancha y emociona casi tanto como el original; de hecho, quien desde aquí os escribe lloró como una magdalena al llegar a su final.



Más voluminoso es mi otro Quijote, como bien podéis apreciar en la fotografía. Se trata de la edición de Rodríguez Marín, que mi abuela me dejó en herencia y que leí a los 18 años durante una gripe eterna de un mes de diciembre cada vez más lejano...
 
Por cierto, soy la de casi siempre, Cecilia, profesora de Latín y Griego para noctámbulos.
Y ahora contadnos vosotros, ¿cómo son vuestros Quijotes? ¿Cuándo y cómo lo leísteis?

jueves, 18 de febrero de 2016

Y POR SAN VALENTÍN... ¡DE TODO CORAZÓN!

¡Estudiantes! ¡Profesores! ¡Amigos todos del Feijoo! Se celebró la pasada semana el muy amoroso día de San Valentín y, si os pasasteis por la biblioteca el viernes a la hora del recreo, veríais cómo un nutrido grupo de compañeros se unieron a la fiesta y, echándole valor y desprendiéndose de complejos, compartieron con todos nosotros poemas de amor en latín, castellano, asturiano y -oh là là!- francés. Quien desde aquí os escribe no quiso perderse la ocasión -no en vano se abrió el acto con Ovidio y sonaron también los versos de Catulo- y acudió provista de cámara. Aquí os dejo el reportaje para aquellos que os lo perdisteis o por si andáis necesitados de una buena dosis de la mejor poesía. ¡Que lo disfrutéis!

De todo corazón, parte I


 De todo corazón, parte II

martes, 2 de febrero de 2016

UN MUNDO FELIZ (ALDOUS HUXLEY), (Mª LUZ FERREIRA FERNÁNDEZ)



¡Estudiantes! ¡Profesores! ¡Amigos todos del Feijoo! Parece que, tras unos inicios un tanto dubitativos, vamos cogiendo carrerilla, gracias, sobre todo, al turno de noche. Nos escribe hoy Mª Luz, inquieta y voluntariosa como es ella, con una magnífica reseña de Un mundo feliz de Huxley, una distopía escrita en los años ’30 del pasado siglo XX que, como el régimen de 1984 de Orwell, parece haberse hecho realidad. Desde aquí, por supuesto, os animamos a aceptar la invitación de leer a Huxley y a Mª Luz le damos las gracias y la invitamos a volver por aquí siempre que quiera. Gratias plurimas! / ευχαριστώ πολύ!
                                                          
Hace unos días, Cecilia, nuestra profesora de lenguas clásicas, me habló de este rincón literario y me animó a participar en él.
Hoy os quiero comentar una novela que leí hace años y he vuelto a releer hace poco: Un mundo feliz de Aldous Huxley.
Huxley nos presenta una sociedad futura, muy desarrollada tecnológicamente, que utiliza todos los medios posibles para condicionar y controlar a las personas para conseguir una estabilidad social o “un mundo feliz”. Los niños no nacen, se hacen, y están genéticamente manipulados para pertenecer a una de las cinco categorías de la población: Alfa (la élite, los más inteligentes), Beta, Gamma, Delta y Épsilon (las castas inferiores, menos desarrolladas física e intelectualmente). En este “mundo feliz” no se plantea ni siquiera la rebelión, porque el lavado de cerebro que tienen los habitantes hace que simplemente no sea deseable. Sus habitantes no conocen otra manera de ser felices que hacer, precisamente, lo que han nacido para hacer. Tienen todas las comodidades que pueden desear y, si esto no fuera suficiente, tienen las drogas de diseño para alterar su visión de la vida y olvidar y modificar sus emociones negativas, que inoportunamente aparecen de vez en cuando. Un mundo feliz describe, en fin, lo que sería una dictadura perfecta: una democracia aparente, donde la población estaría en un estado de esclavitud del que, gracias al sistema de consumo y entretenimiento, ni se enterarían; incluso estarían felices en su cárcel sin muros. 
Es una novela que no deja indiferente a nadie. Creo que, si os animáis a leerla, os va a gustar. Es de ciencia ficción y, sobre todo, invita a pensar, porque, si hace años, cuando la leí por primera vez, pensé que todo lo que nos relataba la novela podría suceder, ahora ya me reafirmo en que sí, podríamos estar en vías de que suceda. Incluso algunas cosas están ya entre nosotros, como el sistema de consumo y entretenimiento, y una especie de esclavitud a trabajos que no nos hacen felices pero en los que hay que seguir para pagar una o varias hipotecas.
Os la recomiendo totalmente, porque, a pesar de la época en que fue escrito (1932), se puede leer muy bien hoy y el autor supo describirnos muy bien una futura sociedad. No es muy largo y se lee fácilmente.
María Luz Ferreira Fernández  (2º Bloque de Bachillerato Nocturno)